El n.1 (10-8-1884) se abre con una misiva firmada por la Redacción, dirigida “A nuestros lectores” (pp.1-3), dando a conocer los propósitos: “al dar á luz LA OPINION JURÍDICA, procuramos llenar la falta que se nota en nuestra querida é importante Granada de una publicación de su clase, falta más de notar, siendo, como es, capital de Tribunal superior ó Audiencia territorial, y de los Ilustres Colegios de Abogados y Notarios, á que da nombre, lo mismo que de su celebrada Universidad Literaria”. Añade: “aspiramos con esta revista, á más de ocupar un modesto lugar entre los colegas profesionales, á ser considerados constantes defensores de los intereses y necesidades del Notariado en general, y muy especialmente de los de su Ilustre Colegio”. Y termina: “También es uno de nuestros más principales proyectos extender la afición al estudio de las mencionadas cuestiones jurídicas, y á que se reconozca por todos nuestros lectores, su conveniencia y utilidad, especialmente por los que tengan, ya la misión de aplicar las leyes ó la de resolver las cuestiones de derecho que le sean consultadas, ya la de anotar con su respectiva ritualidad los juicios en que puedan intervenir, lo mismo que la de formular el derecho por medio de los instrumentos que autoricen, y la entusiasta juventud que se dedica al estudio del Derecho” (¿cómo no recordar la dedicatoria justinianea cupidae legum iuventuti?).
La revista se dividía en cinco secciones: 1.º Doctrinal. 2.º Consultiva y práctiva. 3.º Oficial: circulares del Colegio Notarial, extractos de leyes, decretos, órdenes, circulares y jurisprudencia que publica la Gaceta de Madrid, así como vistas de causas. 4.º De Noticias, bibliografía y variedades. 5.º Avisos.
El año II (n.16, 8-1-1885) se abre con un editorial llamado “Año de 1885” (pp.1-3) en que se ratifica en los propósitos y expresa la necesidad de que los lectores se identifiquen con ellos.