Se puede considerar que fue la primera revista española de Derecho internacional, tanto público como privado. Con ciertos matices, lo mismo se podía decir del Derecho comparado, aunque el interés por la legislación comparada lo encontramos en varias publicaciones previas. Estuvo detrás de la revista el importante impulsor de publicaciones Alejo García Moreno. En su advertencia a los lectores indicó que existía el vacío de una publicación de Derecho internacional «entre los jurisconsultos y Abogados de tantas y tan cultas naciones como hablan nuestra hermosa lengua castellana» en la medida que «la conveniencia y necesidad son evidentes para todo el que haya fijado su atención en el portentoso desarrollo que han alcanzado en estos últimos tiempos las relaciones entre los pueblos, aumentando en la misma proporción el interés y la importancia del Derecho internacional y de todo aquello que facilite el conocimiento de los progresos y del movimiento jurídico que en todos los Estados se van realizando».
Su contenido giró en torno a textos doctrinales de la especialidad, tanto Derecho internacional público como privado. También hubo interés por el Derecho comparado, todavía denominado legislación comparada. Hubo una «Crónica político-internacional» que informaba de sucesos en cuanto a relaciones internacionales y una donde se publicaban Tratados internacionales, repertorio de jurisprudencia extranjera, y una de bibliografía sobre revistas y obras de interés internacional. Expresó también en su prospecto que buscaba establecer un «servicio de corresponsales, sobre todo en las naciones americanas, y consiguiendo el cambio con las principales publicaciones jurídicas de todos los países, así como con los Diarios de las leyes de los diversos Estados». El objetivo fue «reflejar» el «movimiento científico-jurídico» preferentemente sobre el Derecho internacional y la legislación comparada.
También fue de las primeras revistas en expresar claramente una vocación de intercambio y de promover el mecanismo de canje entre revistas, pues pedía a las revistas «se dignen establecer el cambio que desde ahora suplicamos y ofrecemos, con objeto de ir generalizando nuestras reseñas y dan á conocer en España y en América muchas publicaciones de sobresaliente mérito, que pasan desapercibidas para la generalidad, siendo conocidos únicamente de algunos eruditos de los que frecuentan los muy escasos centros de instrucción y recreo en donde aquéllas se encuentran». El intercambio era pues un «doble servicio, al público y á nuestros apreciables colegas».
Durante su breve existencia, cumplió plenamente con el programa propuesto. Respecto al Derecho internacional: una generosa sección doctrinal con trabajos sobre efectos internacionales de las sentencias y proyectos de tratados internacionales la ejecución de sentencias extranjeras, principios del Derecho internacional según Lorimer, la codificación del Derecho internacional privado en América, los regímenes de nacionalidades. El Derecho comparado no se quedó atrás: estudios sobre la consideración jurídica y social de la mujer en diferentes países y épocas, organización regional en diferentes Estados, estudios comparados sobre la legislación hipotecaria y el proceso civil entre Francia y España. También se publicaron múltiples tratados entre países, legislación española de clara incidencia internacional, legislación y jurisprudencia extranjera de interés, una sección de revisión y comentario de las revistas en Europa y América, así como algunas «correspondencias americanas», tratados de extradición y noticias bibliográficas.
Es una revista muy difícil de localizar en España. Hasta donde tengo noticia (pues yo la revisé en Alemania), solo se encuentra públicamente disponible en la Biblioteca Pública Arús en Barcelona.