En 1842 apareció esta publicación que fue la primera en vincular expresamente a la universidad con las revistas jurídicas. En sus portadas, tenía grabados de motivos universitarios («representando la vista de la Universidad de Alcalá de Henares y los estudiantes antes de entrar a las cátedras»). En la revista se publicaron reglamentos y decretos relativos a la universidad, en su parte oficial. Tuvo una parte literaria de poemas, actos de la Academia de Jurisprudencia en los que se transcribían memorias y discusiones sobre preguntas doctrinarias, crónica de causas judiciales, estadística y breves relatos. Las suscripciones eran ante la redacción, calle Angosta de San Bernardo 22, o en la secretaría de la Universidad Central. Sus directores y redactores fueron Pedro López Clarós y Francisco Fábregas de Pilar, los mismos que acompañaron y enviaron a los suscriptores un ejemplar de su traducción del latín al castellano del Digesto Romano-Español de Juan Sala «adicionado con las variantes que el nuevo derecho español ha introducido» (la segunda edición se subtituló «traducido del latín al castellano y adicionado con las oportunas variantes del derecho nacional […] obra necesaria á los magistrados, jueces, abogados, notarios, escribanos y cursantes juristas»).
Se trata de un título conocido por ser una de las tribunas donde Pedro José Pidal publicó su discurso Estudio de la Legislación y Jurisprudencia. Examen de las Escuelas de Derecho aparecida en las postrimerías de la publicación universitaria, y que ha sido estudiado como un hito de la Escuela Histórica del Derecho en España.