Fue una de las publicaciones más representativas de la época isabelina, en cuanto a contenidos y estilos. Fundada por Francisco Pareja de Alarcón se trató de una larga publicación que varió en muchas ocasiones de subtítulo. Las relaciones políticas y profesionales de Pareja explican el talante conservador y corporativista de la publicación, como se ha escrito. En general, no destaca por la calidad de su contenido de artículos doctrinales, sino por ser un buen ejemplo de revista como medio de circulación de materiales jurídicos, de promoción de intereses corporativos y, al comienzo, con un propósito de fortalecer la Administración en vías de consolidarse. Desde sus inicios habló de las misiones «patrióticas» de la prensa, y de principios como «moralidad, ilustración y trabajo» como guía editorial. Así, se publicación las partes típicas de una revista de este estilo tales como índices cronológicos de los Reales Decretos y Órdenes Generales insertados en la sección oficial, dividida en cada uno de los Ministerios –Ultramar, Fomento, Gracia y Justicia, Guerra, Hacienda–, la sección de crónica de tribunales con decisiones del Tribunal Supremo y del Consejo de Real, éste último centrado en resolver competencias entre administración y autoridad judicial o decidir las autorizaciones para procesar a alcaldes y otros funcionarios, y una sección de consultas. Republicó textos doctrinales de otras revistas. Un balance global de “El Faro Nacional” deja materiales relevantes para cualquier objeto de pesquisa sobre la cultura jurídica isabelina. Aunque tuvo seis épocas, todas mantuvieron un carácter semejante. En su momento participaron corporaciones como el Colegio de Abogados de Madrid, la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación y la Sociedad de Socorros Mutuos de Jurisconsultos.