El “Retretito” Regio es una de las estancias más destacadas del Ayuntamiento de Segovia. Como su propio nombre indica, esta estancia es un retrete y, como tal, dispone de los servicios del mismo. Fue a partir de 1852 cuando decidieron llevar a cabo obras de remodelación en la casa consistorial segoviana, pues se consideró imprescindible la dotación de una nueva escalera con amplitud que acondicionase el interior del edificio, así como la modificación de los espacios dedicados a oficinas.
Para la decoración en escayola de la estancia fue escogido el artista José Pelli, natural de Madrid. En cambio, para la decoración pictórica fue el artista Antonio García quién recibió el encargo. El artista decoró el “Retretito Regio” de una forma muy particular. Teniendo en cuenta que es una estancia de planta centralizada, aprovechó el espacio de...
Retretito regio, Ayuntamiento de Segovia
Nombre
Retretito regio, Ayuntamiento de Segovia
Otro nombre
Retrete Regio
Lugar
Segovia
Provincia/región
Castilla y León
País
Siglo
Años
1852
Artista
Ildefonso Vázquez Zúñiga: arquitecto de las obras de remodelación
Antonio García y José Pelli: decoradores del “Retretito Regio”.
Antonio García y José Pelli: decoradores del “Retretito Regio”.
Tipo de pieza
Resumen
El “Retretito” Regio es una de las estancias más destacadas del Ayuntamiento de Segovia. Como su propio nombre indica, esta estancia es un retrete y, como tal, dispone de los servicios del mismo. Fue a partir de 1852 cuando decidieron llevar a cabo obras de remodelación en la casa consistorial segoviana, pues se consideró imprescindible la dotación de una nueva escalera con amplitud que acondicionase el interior del edificio, así como la modificación de los espacios dedicados a oficinas.
Para la decoración en escayola de la estancia fue escogido el artista José Pelli, natural de Madrid. En cambio, para la decoración pictórica fue el artista Antonio García quién recibió el encargo. El artista decoró el “Retretito Regio” de una forma muy particular. Teniendo en cuenta que es una estancia de planta centralizada, aprovechó el espacio de la bóveda para insertar la decoración más llamativa. Sobre un fondo blanco representó una especie de tondo en el cual se incluía la representación del espacio divino con dos alegorías en el centro –la agricultura y la industria– además de un putti. El propio tondo está rodeado por una especie de cenefa de estilo griego que remarca la separación del mismo. En torno a este espacio, Antonio García representó otros ocho tondos, en formato ovalado y fondo negro, sobre los que incluyó decoración figurativa. En concreto, una mujer por tondo, y lo más característico de esta representación es que cada una de estas mujeres era una interpretación de los esquemas compositivos de las “Danzatrice” de la Villa de Cicerón. Por otro lado, estas representaciones están separadas por elementos decorativos arquitectónicos y vegetales que refuerzan el carácter clásico del espacio. Se utilizan cenefas de estilo griego también en este caso para remarcar el espacio decorado.
En el caso de los muros, el artista escogió una decoración cromática, basada en el estilo pompeyano, utilizando el color rojo, ocre y azulado dispuesto en franjas desde la cúpula hasta el suelo.
Para la decoración en escayola de la estancia fue escogido el artista José Pelli, natural de Madrid. En cambio, para la decoración pictórica fue el artista Antonio García quién recibió el encargo. El artista decoró el “Retretito Regio” de una forma muy particular. Teniendo en cuenta que es una estancia de planta centralizada, aprovechó el espacio de la bóveda para insertar la decoración más llamativa. Sobre un fondo blanco representó una especie de tondo en el cual se incluía la representación del espacio divino con dos alegorías en el centro –la agricultura y la industria– además de un putti. El propio tondo está rodeado por una especie de cenefa de estilo griego que remarca la separación del mismo. En torno a este espacio, Antonio García representó otros ocho tondos, en formato ovalado y fondo negro, sobre los que incluyó decoración figurativa. En concreto, una mujer por tondo, y lo más característico de esta representación es que cada una de estas mujeres era una interpretación de los esquemas compositivos de las “Danzatrice” de la Villa de Cicerón. Por otro lado, estas representaciones están separadas por elementos decorativos arquitectónicos y vegetales que refuerzan el carácter clásico del espacio. Se utilizan cenefas de estilo griego también en este caso para remarcar el espacio decorado.
En el caso de los muros, el artista escogió una decoración cromática, basada en el estilo pompeyano, utilizando el color rojo, ocre y azulado dispuesto en franjas desde la cúpula hasta el suelo.
Referencias bibliográficas
AMS. XX-497-2-1-