El actual Palacio de Minería de la Ciudad de México fue diseñado y construido por Manuel Tolsá desde 1797 hasta 1813. De acuerdo con el Mosaico Mexicano en 1841 el Salón Rojo "formaba parte de la sección del Palacio destinada a la vivienda del director del Colegio. Más tarde, en 1877, al instalarse en el sector oriental del edificio la Secretaría del Estado y del Despacho de Fomento, fue convertido en salón de recepción. Este destino lo mantuvo hasta la segunda mitad del siglo XX". En 1891, siendo Oficial del Despacho de Fomento y Agricultura, el Ingeniero Manuel Fernández Leal, se hizo la extraordinaria ornamentación, utilizando el fino arte de la talla en madera de puertas, lambrines y chimenea, resaltando sobre los dinteles de las puertas fastuosas cartelas o escudos con bellas caras de mujer y guirnaldas de flores, frutos y vegetales inspirados en las ornamentaciones encontradas en Pompeya. Las paredes están forradas con papel tapiz y arriba de ellas se observan cuatro frisos, ligeramente cóncavos, con pinturas al óleo que tomaron como modelo los amorcillos que se hallan en el triclinium de la Casa de los Vetti, cuyo autor fue Tiburcio Sánchez de la Barquera, artista egresado de la Academia de San Carlos, que había trabajado con Santiago Rebull, en el ornato del Castillo de Chapultepec. Los frisos del lado norte aluden al Despacho de Fomento con las alegorías a la vitivinicultura, la floricultura, la apicultura y la cunicultura. Mientras que los del lado Sur a la agricultura con la representación de la cosecha de maíz, papa y trigo. Hacia el Oriente se simboliza con tres pequeños leñadores a la silvicultura, su explotación y restablecimiento; en el friso del Poniente se personifican los cinco sentidos a través de infantes, uno viendo las páginas de un libro, otro escuchando a un gran caracol marino, dos enfrascados en una lucha cuerpo a cuerpo; uno más saborea una manzana y el último aspira el olor de las rosas de un florero. La influencia de las ciudades del Vesubio también se encuentra en la ornamentación de las sillas y en las estatuas que decoran el espacio. El Salón Rojo es actualmente un despacho alterno del Rector de la Universidad Nacional Autónoma de México.