Basada en hechos reales, la película retrata el asesinato de una joven mexicana a manos de una banda de jóvenes suburbanos de Chicago que pretendían divertirse maltratando a indigentes. El grupo asume que su acto no tendrá consecuencias por ser una trabajadora ilegal en Estados Unidos. Sin embargo, la detective de policía Carla Moreno, de origen hispano, se encargará de investigar el caso, conduciéndola por un mundo de racismo y corrupción policial. Mientras tanto, el padre de la joven llega desde México para repatriar el cuerpo de su hija, pero éste desaparece misteriosamente, obligando al padre a iniciar una investigación por su cuenta para impartir justicia.