Un ladrón italiano de nivel internacional que “ha trabajado” mucho en América, se encuentra encargado de un robo importante en una joyería de lujo de Madrid. Para hacerlo recluta a tres cómplices: Jaime, un español desterrado desde mucho tiempo; un estudiante en apuros, campeón de tiro, novio de una enfermera que no sabe nada de las “indelicadezas" que cometió; y un carterista madrileño muy talentoso y castizo. Se preparan con mucha eficiencia. Pero durante el atraco, el dueño de la joyería hiere al estudiante con su pistola. El comisario Don Manuel Herrera, de mucha experiencia, ayudado por Ramírez, un inspector novato lleno de entusiasmo pero bastante torpe, tiene que resolver el asunto. La desunión va a aparecer entre los atracadores acorralados por la policía. Jaime muere de un accidente con su coche al huir de una patrulla. Baldini dispara a sus dos cómplices más jóvenes para que no hablen y a la enfermera que vino a curar a su novio.