Cuatro historias sobre el arte de no casarse en España. En la primera, Pascual se convierte en militar vitalicio para darse la gran vida a costa de las sirvientas solteras. En la segunda, Alfredo aún recuerda las palabras de su padre al recomendarle que no se fíe de las mujeres, puesto que solo piensan en pescar un marido, pero Alfredo no conocía todos los detalles de este consejo. En el tercer relato, un muchacho regresa a su pueblo natal con su título de abogado, un elemento suculento para las solteras. Por último, Benito López se marcha de vacaciones convencido de que podrá ligar más fácilmente con las extranjeras.