El cognomen Succesus, es conocido en Tarraco y se documenta en el seno de la familia Caesaris desde la época de Vespasiano (1). Elaine no tiene paralelos en Hispania; en su forma masculina aparece vinculado al servicio imperial (2). Se trata sin lugar a dudas de dos esclavos imperiales. La forma de denominar al propietario está muy extendida antes de mediados del siglo II. Como señalan Fabre, Mayer y Rodà (2002, p. 42): «Leur présence en ce lieu (la vie du sanctuaire est attestée de l’époque augustéenne au deuxième siècle) inciterait à conclure à l’existence, sinon à Can Modolell même, du moins dans les environs, d’un domaine impérial auquel ce couple aurait été attaché de façon permanente. Rappelons qu’un affranchi d’un procurateur de Vespasien été déjà connu ici Le contexte nous conduirait à placer ce document dans la seconde moitié du deuxième siècle». Vemos, de nuevo, cómo la datación se establece en virtud del contexto preestablecido. Puesto que los editores del epígrafe están convencidos de que el mitraísmo en Can Modolell se ha desplazado desde Mérida, donde se conoce a partir del 155 d.C., no se puede situar este nuevo documento más que con posterioridad a esa fecha. No tienen en cuenta que si el mitreo de la calle Espronceda de Mérida es, en efecto, un mitreo y está bien datado, no tendrían problema para admitir otra cronología anterior para este epígrafe. Sin embargo, creo que se ejerce menos presión cronológica si se desvincula este documento de los episodios emeritenses. Lo más sorprendente es que en la editio princeps del epígrafe, Mayer y Rodà (1992, p. 202) dicen expresamente: «és el coronament d’un altar rodó dedicat a Mitra, datable possiblemente d’època Flavia. Aixó ens porta a pensar que la peça que ara presentem es pot situar sense gaire problema en una datació que pot abraçar tot el segle I, però preferentemente la segona meitat». En la publicación más reciente (2002, pp. 41-42) no explican por qué han cambiado de opinión en relación con la cronología. Por motivos contextuales yo, en cambio, prefiero la datación más antigua; las razones están desarrolladas en el capítulo correspondiente al Estudio Histórico, apartado 1.2. El proceso de introducción de Mitra en la Tarraconense, pp. 28-33.