Por real orden de 10 de mayo de 1826 obtuvo, mediante oposición, la cátedra de “Instituciones de Derecho patrio” de la referida Facultad (que tomó en posesión el 3 de junio del mismo año). Desempeñó la cátedra hasta el mes de diciembre del 1835 cuando —por medio de un oficio del Jefe Político— fue separado de ella, “sin forma de juicio”, como consecuencia de la reposición del catedrático D. Pio Laborda. Fue declarado cesante en el Claustro general que se celebraba el 7 de enero de 1836.

Solicitó el 22 de enero de 1844 su reposición en la cátedra que obtuvo por oposición o en otra equivalente. Por real orden de 14 de mayo de aquel año fue repuesto en la cátedra de “primer año de Jurisprudencia” ya que era la “que mayor analogía tiene con las materias que fueron objeto de la oposición” con sueldo anual de 12.000 reales hasta que por real orden de 22 de junio de 1847 ascendió por antigüedad al sueldo de 14.000 reales (que disfrutó hasta el día en que falleció). En el “Proyecto del escalafón general de catedráticos” de 1846 se encuentra colocado, por orden de antigüedad, en el número 138. Resulta que —descontándose 8 años, 5 meses, 6 días de tiempo por “cesantía”— se le reconocieron 11 años, 16 días de “tiempo verdadero que resulta de antigüedad”. En el primer escalafón aparece como catedrático de "Derecho romano" en la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad de Zaragoza ocupando el número 132.