Se le confirió el grado de Bachiller en Filosofía, en la Universidad de Santiago de Compostela, el 5 de noviembre de 1818, nemine discrepante, siendo examinado por los doctores Juan Francisco Gómez, Domingo Fontán y Ramón Malbárez. Previamente, cursó y ganó en la misma universidad un curso de Aritmética, Álgebra y Geometría y otro de Lógica y Metafísica con arreglo al Plan de 1807, con los correspondientes de academia, que tuvieron lugar de San Lucas de 1816 a junio de 1818. En octubre de 1818 se matriculó de primer año de Instituciones Civiles. Como bachiller en Filosofía se le eximió del estudio de Filosofía Moral. Terminó el primer año en junio de 1819. De octubre de 1819 a junio de 1820 ganó el 2º año de Instituciones Civiles. De 1820 a 1821 superó Instituciones canónicas y en los siguientes cursos: Historia del Derecho Español, Economía Política y, finalmente, el 7º año de leyes en el curso 1823-1824.

El grado de Bachiller en Leyes lo consiguió el 28 de junio de 1822, nemine discrepante, ante un tribunal formado por los doctores Flores, Parga y Junquera. El 4 de octubre de 1825 defendió el examen para la obtención del grado de licenciado y tras las preguntas realizadas por el tribunal a puerta cerrada y durante una hora, fue aprobado nemine discrepante. Dos días después, el 6, escogió puntos para la repetición. De las 400 bolas posibles escogió una de las tres seleccionadas, en concreto la 261 que empezaba: “Fideicommisum” y acababa en “testamento”, leyendo el 13 de octubre. El día siguiente, seleccionó puntos para el examen secreto. Escogió el número 59 que empezaba en “Vericulum” y terminaba en “pertinet”. Se examinó el día 15 de octubre, aprobando nemine discrepante. Se le confirió el grado de la licenciatura en leyes el 16 de octubre de 1825 y el Doctorado lo obtuvo al año siguiente, el 30 de abril de 1826, todo ello en la Universidad de Santiago de Compostela.

De 1825 a 1826 cursó el 2º año de cánones y, a continuación, Decretales y Disciplina general y Particular. En agosto de 1829, solicitaba el grado de bachiller y licenciatura en cánones, puesto que había finalizado la carrera.

Fue colegial de Fonseca, donde entró el 17 de julio de 1825. Obtuvo la beca por leyes después de la aprobación de la Junta del Colegio celebrada el 17 de enero de 1825. Los ejercicios correspondientes consistían en la preparación de una lección sobre un apartado del Digesto sacado a suertes de entre 24, que leería el candidato durante media hora. Debería también responder a tres argumentos de sus coopositores contra dos conclusiones que deduciría del capítulo elegido. Tendría, además, que argüir tres veces a los coopositores. Después de la celebración de éstos, ocupó el segundo lugar de los puestos correspondientes al Arzobispado de Santiago, tras Joaquín Losada Pimentel. Sin embargo, al quedar vacante la beca del Obispado de Lugo, por no demostrar suficientemente su pobreza el primer elegido, Manuel Núñez Teijeiro, Vicente Castro la obtuvo por decisión del Real Consejo adoptada en el mes de abril, en concreto el día 7.