Tras los grados, desempeñó ejercicios públicos en ambas facultades de leyes y cánones de la Universidad de Huesca. Desempeñó la regencia de la cátedra cuarta de Leyes por nombramiento del Claustro en el curso 1823-24. Sustituyó en muchas ocasiones diferentes cátedras de jurisprudencia civil en ausencias o enfermedades de sus propietarios.

En 1832 aprobó los ejercicios de la oposición a la cátedra de Práctica forense vacante en la Universidad de Huesca y obtuvo el segundo lugar en la propuesta. El 12 de mayo de 1833 tomó posesión de la cátedra de Instituciones civiles en la Universidad de Huesca.

El 28 de septiembre de 1845 tomó posesión de catedrático de Prolegómenos del derecho, historia y elementos del derecho romano (primer año de jurisprudencia) de la Universidad de Barcelona.

El 21 de julio de 1846 tomó posesión de la cátedra de segundo año de jurisprudencia de la Universidad de Zaragoza. Por real orden de 21 de octubre de 1853 se le concedió la categoría de ascenso.

Poco antes de cumplir los 60 años, el 8 de febrero de 1856, “por el mal estado de su salud y quebrantada naturaleza” solicitó la jubilación con el haber que por clasificación le correspondía, la reina tuvo a bien concederla por real orden de 14 de marzo de 1856.